Vamos a decirlo: hay mucha preocupación entre los periodistas. Algunos, incluso, están al borde de un ataque de nervios. En Clarín, se respira un aire pesado como nunca, con los directivos merodeando todo el tiempo, escribiendo notas sin firmar, presionando a sus empleados, forzando sus conciencias...
El deterioro de Clarín es tal que hoy, en las oficinas de la calle Piedras, los empleados bromean con el siguiente titular: “Clarín: Néstor Kirchner prendió la bengala en Cromañón”. A tal punto ha llegado la falta de profesionalismo en dicho medio, que algunos de sus periodistas, frustrados y "quemados" por la presión de sus jefes, ya están buscando otro trabajo. Como se sabe, de aprobarse la ley (y reglamentarse), Clarín debería desprenderse de algunos negocios y otras empresas que no son tan negocio. Resulta por lo menos irrisorio que una empresa que ha comprado ilegalmente canales y repetidoras en el Interior (la ley todavía se lo prohibía) y no ha cumplido nunca con las normas del COMFER, hoy reclame que se viola la "seguridad jurídica". Sus dueños, que deberían haber ido presos entonces por no cumplir la ley, hoy se dan el lujo de dar clases de ética y moral. Y no contentos con eso, mienten abiertamente a la opinión pública con esto de que "TN va a desaparecer" cuando bien se sabe que TN no desaparecería, sino que cambiaría de licenciatario, como corresponde a cualquier proceso ordenado de prestación de servicios en concesión.
Entre otras desprolijidades del estilo, también se encargó de sobre-adjetivar (y negativamente) toda iniciativa del gobierno nacional (¿Macri está haciendo todo joya?) y manipular declaraciones de cualquier funcionario, para hacerla cuadrar con sus propios intereses.
Estamos a unas pocas horas de que los senadores den la media sanción que falta a una ley que las organizaciones sin fines de lucro consideramos más que necesaria, una deuda histórica. Los humanistas nos encontramos con la gente de Tupac Amaru a las 16hs en el Cabildo para marchar al Congreso y hacer la vigilia ahí.
Quedan varias cuestiones por definir todavía, pero las agujas del tiempo de la política a veces giran más rápido de lo que uno quisiera. Mañana seguramente se inaugura una nueva etapa, de profundización en estos temas pendientes. En horabuena, ¿no?
Revista Batahola
No hay comentarios:
Publicar un comentario