Hace un año, murió el Capitán América.
Aquí nuestro merecido homenaje:
En una escalinata, al pie de una columna, como Julio César, falleció el superhéroe más patriota de la editorial Marvel: el Capitán América.
Este “centinela de la lucha por la libertad y los derechos”, según lo definió el NY Times, se negó a aceptar la ley antiterrorista promulagada por Bush tras los atentados del 11-S, que obligaba a las personas con superpoderes a inscribirse en un registro policial. Por ello es llevado a juicio.
Es asesinado por un francotirador en la escalinata del Palacio de la Justicia, asistido por una mujer y un policía negro y rodeado de pancartas que rezan “Capitán América, traidor”.
Obviamente, muchos se preguntaron: ¿ha muerto la esencia de EE UU?
El Capitán América, creado en 1941, luchó contra Hitler y contra la URSS. Se supone que encarna los valores fundacionales de Estados Unidos, por lo que su muerte podría interpretarse como el fin de esos valores.
Responsables de Marvel han admitido que la trama del cómic ha sido escrita intencionadamente como una alegoría de los asuntos de la vida real, como los ataques del 11-S, la guerra contra el terrorismo o la Patriot Act (ley antiterrorista de EE UU que recorta los derechos civiles).
No obstante, el editor jefe de Marvel, Joe Quesada, ha asegurado que, si bien “se pueden realizar muchas lecturas”, él no desea “decir a la gente qué es lo que se debe interpretar”.
No es la primera vez que los editores deciden matar a un personaje para luego resucitarlo y así poder atraer la atención del público. Ni siquiera es la primera vez que se da por muerto al Capitán América.
No obstante, este patriótico héroe no está tan en forma como Supermán, Batman o Spiderman, quizá porque, entre otras cosas, no ha logrado seducir a la industria cinematográfica de Hollywood, aunque eso puede cambiar muy pronto, según ha declarado el presidente de Marvel, Dan Buckley.
El Capitán América, creado en 1941, luchó contra Hitler y contra la URSS. Se supone que encarna los valores fundacionales de Estados Unidos, por lo que su muerte podría interpretarse como el fin de esos valores.
Responsables de Marvel han admitido que la trama del cómic ha sido escrita intencionadamente como una alegoría de los asuntos de la vida real, como los ataques del 11-S, la guerra contra el terrorismo o la Patriot Act (ley antiterrorista de EE UU que recorta los derechos civiles).
No obstante, el editor jefe de Marvel, Joe Quesada, ha asegurado que, si bien “se pueden realizar muchas lecturas”, él no desea “decir a la gente qué es lo que se debe interpretar”.
No es la primera vez que los editores deciden matar a un personaje para luego resucitarlo y así poder atraer la atención del público. Ni siquiera es la primera vez que se da por muerto al Capitán América.
No obstante, este patriótico héroe no está tan en forma como Supermán, Batman o Spiderman, quizá porque, entre otras cosas, no ha logrado seducir a la industria cinematográfica de Hollywood, aunque eso puede cambiar muy pronto, según ha declarado el presidente de Marvel, Dan Buckley.
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