Hemisferio norte. Estados Unidos. Washington. Departamento central de la CIA. Una imagen similar a la que nos entrega Google Earth nos mete en tema y así arranca lo que terminará siendo una especie de sátira sobre las películas de espionaje y una desolada postal de la sociedad norteamericana.
Todo esto, en clave de comedia misantrópica, con el indiscutido sello de los hermanos Coen. El gran acierto de Quémese después de leerse no reside en la historia en sí, sino en los personajes y sus diálogos cargados de paranoia, ignorancia, avaricia y vanidad.
Cada uno de los roles (uno más desopilante que el otro) parece calzarle a la perfección a este elenco de lujo en el que se cuentan George Clooney, John Malkovich, Tilda Swinton, Frances McDormand y Brad Pitt (en su primera participación en el mundo de los Coen).
Todo esto, en clave de comedia misantrópica, con el indiscutido sello de los hermanos Coen. El gran acierto de Quémese después de leerse no reside en la historia en sí, sino en los personajes y sus diálogos cargados de paranoia, ignorancia, avaricia y vanidad.
Cada uno de los roles (uno más desopilante que el otro) parece calzarle a la perfección a este elenco de lujo en el que se cuentan George Clooney, John Malkovich, Tilda Swinton, Frances McDormand y Brad Pitt (en su primera participación en el mundo de los Coen).
El modo en que se entrecruzan las historias de unos y de otros da lugar a momentos hilarantes. A lo largo del film, nada parece tener sentido y eso explica el excelente final de la película.
Los reyes del cinismo están de regreso. Bienvenidos.
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