EL OFICIAL YUTA

El oficial Yuta, es un comic de J. J. Rovella

Aquí tenemos el prólogo de Sendra:

Javier Rovella es una humorista joven. Eso en sí mismo no significa gran cosa porque es una posibilidad común al género humano.

La ventaja de Javier es que tiene en su juventud el germen claro de quien abraza una profesión con el fervor y la convicción de que hay uin modo correcto de hacer las cosa.

El humor es humor en tanto ciretos valores se respeten. De lo contrario, se cae en la comicidad, que es el hermano simpático del humor. ¿Cuál es la diferencia? Con el humor uno intenta expresar sus ideas (pueden ser estas grandes o no tanto) y decirlas de tal forma que el relato nos atrape, nos sorprenda, y si es posible nos convenza. La comicidad, en cambio, tiene como objetivo hacer reir al otro, sea cual sea el contenido.

Es indudable que con un cómico podremos reírnos a carcajadas, y hasta es necesario que así sea. Pero también lo es que con un humorista quedemos satisfechos de un modo diferente.

Creo que Javier tiene todos los elementos necesarios para inscribirse en esta segunda categoría, la de los humoristas con intencines, con voluntad para comunicarlas y con los elementos técnicos para lograrlo. Él sabe que no alcanza con que el otro se ría; es necesario que tambien conozcan su modo de pensar, que se cree un código, que exista ese diálogo indispensable que completa la obra.

A favor tiene su juventud que le da el ímpetu y el fuego necesarios para su tarea.

En contra también tiene su juventud, que le muestra que el camino tiene curvas, contracurvas y, de vez en cuando, alguna recta despejada que nos permite avanzar rápido.

Lo real es que él está parado sobre ese camino, con muy buenos pasos dados, con ideas y con voluntad.