El proyecto "Enter Miraski" (que ya lleva siete infatigables y laboriosos años) sigue reorganizándose, y empieza a vislumbrarse (de una buena vez) la recta final.
La superabundancia de textos, ramificaciones y todo lo demás me impulsa a dividir el proyecto en tres libros.
Por un lado, tenemos la novela propiamente dicha y después se agrega un libro de anotaciones, diálogos y opiniones que podría llamarse "Notas de Diego Miraski" (no es un título muy original, pero está bien por el momento). Será como un volumen de descarte (en el mejor sentido de la palabra) donde puedo incluir todos aquellos fragmentos que enlentecen la novela (escenas de Apuntes y de Informe Nocturno, el documental de Paolucci, críticas de películas y otras anotaciones).
Esto viene bien porque la novela quedará concentrada y enmarcada en los tópicos más relevantes (Carolina, Noelia, la filmación de El Ejército de las Tinieblas, la novela autorreferencial, la crisis de los 30 y el inicio del viaje catártico).
Ambos libros cierran un ciclo, así que es importante que queden cerrados este año para así pasar a la tercera parte. El presente, con todo lo que eso implica: el viaje interior, Chascomús y la costa, los amores platónicos, las conversaciones teológicas, Montevideo, y seguro incluiremos el siloísmo, las experiencias guiadas y toda la introducción de la disciplina mental). No sé muy bien hacia adónde voy a llegar con esta tercera parte. Es presente puro, inmanejable e impredecible.
La superabundancia de textos, ramificaciones y todo lo demás me impulsa a dividir el proyecto en tres libros.
Por un lado, tenemos la novela propiamente dicha y después se agrega un libro de anotaciones, diálogos y opiniones que podría llamarse "Notas de Diego Miraski" (no es un título muy original, pero está bien por el momento). Será como un volumen de descarte (en el mejor sentido de la palabra) donde puedo incluir todos aquellos fragmentos que enlentecen la novela (escenas de Apuntes y de Informe Nocturno, el documental de Paolucci, críticas de películas y otras anotaciones).
Esto viene bien porque la novela quedará concentrada y enmarcada en los tópicos más relevantes (Carolina, Noelia, la filmación de El Ejército de las Tinieblas, la novela autorreferencial, la crisis de los 30 y el inicio del viaje catártico).
Ambos libros cierran un ciclo, así que es importante que queden cerrados este año para así pasar a la tercera parte. El presente, con todo lo que eso implica: el viaje interior, Chascomús y la costa, los amores platónicos, las conversaciones teológicas, Montevideo, y seguro incluiremos el siloísmo, las experiencias guiadas y toda la introducción de la disciplina mental). No sé muy bien hacia adónde voy a llegar con esta tercera parte. Es presente puro, inmanejable e impredecible.
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