Liberación de la conciencia. Vivir intrensamente y desbloquear absolutamente todo. Poder decirles a mis viejos que los quiero sin sonrojarme, y a partir de ahí, todo lo demás. Desperenderse de las limitaciones de la memoria, de la conciencia, de los prejuicios y de los temores para poder hacer todo. Me doy cuenta que la mayoría de las veces que hice algo interesante, siempre había una pre-visualización mental positiva. Estaría bueno hacer esto, quiero hacer aquello, me veo a mí mismo haciendo esto, y de ahí pasamos a la acción. Una imagen positiva desencadena todo el resto. El problema es que las imágenes positivas no abundan, por lo general permanecen los temores y las especulaciones infinitas. Tarea cotidiana para agendar: cultivar las imágenes positivas.
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